Relacionadas con la espiritualidad, estos antiguos cilindros de cera son fuente de energía y conexión con lo divino, no en vano son utilizada en los rituales de todas las religiones considerándose elementos indispensables, las velas son potentes ofrendas y poseen distintas propiedades de acuerdo a sus colores.
Las velas son poderosas fuentes de poder en la metafísica, el esoterismo, una llama encendida a partir de una mecha y cera fría conlleva una fuerte carga simbólica que ha atravesado generaciones y civilizaciones, vida y energía, las velas están presentes en los matrimonios, en los altares y templos de todas las religiones, en rituales esotéricos, y también en los funerales.
La vela se usa en los rituales místicos para representar los cuatro elementos de la naturaleza. Una vela encendida pone en movimiento las fuerzas de la naturaleza. La luz de la vela representa el elemento fuego, como purificador de las energías. El contenido de la vela, la cera, encarna el elemento tierra, que se licúa connotando al elemento agua, para luego transformarse en gas, representando el elemento aire.
Una imagen clásica es la una persona encendiendo un cirio en un templo religioso, como gesto de petición de un favor o milagro. Y es que las velas son las receptoras simbólicas de los pedidos que cada persona realiza de acuerdo a su fe y creencias, y se usan mayoritariamente como ofrenda para que los seres santos, maestros, ángeles o energías concedan lo pedido.
Se dice que es necesario que cada vez que se encienda una vela se haga con mucha concentración y respeto por todos los seres, ya que la mente es el primer emisor energético y esa voluntad es plasmada en la vela.